lunes, 24 de julio de 2017

¿Pero de qué proyecto postal hablamos? ¿En extinción?, ¿Low Cost? o ¿Un Correos de país?

  • CCOO exige un Servicio Postal Universal (SPU) con una financiación de, al menos, 230 millones anuales (Plan de Prestación del SPU) que garantice el servicio público a los ciudadanos y, además, dé holgura a la cuenta de resultados de Correos...
  • Correos debe ser el Operador Postal, logístico y diversificador de referencia en nuestro país, con un Plan Estratégico 2017-2021.
  • Y con un marco de derechos que haga atractivo el proyecto al colectivo de 57 mil personas que formamos parte de esta empresa, lo que pasa, al menos, por un nuevo Convenio/Acuerdo para el período 2017-2021.
Ocho meses después de iniciada la legislatura, Correos sigue igual. Mejor dicho, peor: con un recorte de 120 millones en la financiación del SPU en el inicio de la tramitación de los PGE-2017, corregida en parte (60 mill) y con la promesa de Fomento de rescatar el resto (otros 60 mill) antes de final de año (que ya veremos), lo único que se ha evidenciado es que Correos NO ESTÁ SIENDO UNA EMPRESA DE REFERENCIA para el Gobierno de este país. Es decir, la vida postal es eso que va sucediendo todos los días "aquí dentro" mientras los Ministerios de Hacienda y Fomento (propietario y regulador) ningunean a Correos. Y lo que está sucediendo es que se están cambiando los sistemas productivos (hacia un caos paquetero), las condiciones laborales, inundando la empresa de tiempos parciales, ocultando el empleo estructural, cambiando los turnos y horarios, cambiando las funciones, promoviendo polivalencias, modificando condiciones sustanciales de trabajo, en una desregulación galopante que está rompiendo el consenso interno del que nos dotamos en el Convenio/Acuerdo.
 
Dicho de otra forma, a falta de un proyecto estratégico respaldado por el Gobierno, que sitúe a Correos en el mapa postal nacional e internacional, el único proyecto que se nos ofrece es que los trabajadores/as lo saquen adelante a costa de su sacrificio y a golpe de riñón. Los mismos trabajadores y trabajadoras que llevan congelados/recortados salarialmente 6 años, con un Plan de Pensiones sin aportación empresarial, con un Convenio bloqueado hace tres años y medio, con sobrecargas por falta de plantilla, sin más expectativa que tener la suerte de "pillar" una ventanilla de ATC (si es que no se bloquea para convertirla en tiempo parcial)… o ser funcionario y salir en movilidad interministerial.
 
¿Ése es el proyecto en el que se les quiere implicar? ¿Una empresa de paquetería "Pepe Pérez" de medio pelo, llena de minijobs y chicos/as para todo? Pero, de verdad de la buena, ¿alguien quiere sacar un proyecto empresarial público "pa¿lante" sin una sola contrapartida para un colectivo impregnado de desmotivación? A la pregunta "¿A qué proyecto debe apostar Correos?", caben tres respuestas: la resignación a un Correos residual(cerrar "la mina"); un proyecto precario y low cost (devaluación); o un Correos referente, en lo postal y logístico, y, por qué no, en lo financiero, y de país. Éste es el que CCOO PROPONE Y DEFENDERÁ SOBRE LOS SIGUIENTES EJES…
 
- UN SERVICIO POSTAL UNIVERSAL (SPU) con una financiación de, al menos, 230 millones anuales (Plan de Prestación del SPU) que garantice el servicio público a los ciudadanos y, además, dé holgura a la cuenta de resultados de Correos.
 
- Correos debe ser el OPERADOR POSTAL, LOGÍSTICO Y DIVERSIFICADOR DE REFERENCIAen nuestro país, con un Plan Estratégico 2017-2021 que le permita jugar en la Champions League Postal, como el alemán, el francés o el británico y con capacidad de hacer adquisiciones, dentro y fuera de nuestro país, que generen ingresos que puedan sostener la actual estructura de costes. 

- Y CON UN MARCO DE DERECHOS QUE HAGA ATRACTIVO EL PROYECTO AL COLECTIVO DE 57 MIL PERSONAS que formamos parte de esta empresa, lo que pasa, al menos, por un nuevo CONVENIO/ACUERDO para el período 2017-2021, paralelo al plan estratégico, con incremento salarial, consolidación de hasta 10.000 empleos, que regule derechos y condiciones laborales en el nuevo marco productivo que va naciendo y que permita una salida a la plantilla, funcionarios y laborales, con prejubilaciones y excedencias voluntarias, además de movilidad interministerial/interadministraciones.
 
¿Y PARA CUÁNDO DICE USTED QUE ES?
 
Todas estas medidas, REQUIEREN UN FUERTE RESPALDO POLÍTICO QUE, dicho sea de paso, APROVECHAMOS PARA EXIGIR. Respaldo político que debe traducirse, negro sobre blanco, en compromisos y autorizaciones a fijar en la Ley de Presupuestos de 2018 y/o en los marcos legales necesarios. Ésta, y no otra, sería la ÚNICA VÍA PARA QUE LOS TRABAJADORES/AS SE CREAN QUE, DETRÁS DE TANTA VERBORREA POLÍTICA, HAY UN PROYECTO PARA CORREOS.
 
Pero, seamos claros: si se insiste en el camino de la devaluación de derechos y el Correo low cost, los responsables políticos deben ser conscientes de que SE ESTÁN ABRIENDO LAS PUERTAS A UNA FUERTE CONFRONTACIÓN. 

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